Sabían que….Un día como hoy, hace 205 años, fue fusilado, el Generalísimo, José María Teclo Morelos y Pavón, acusado de traición a la Corona Española, al luchar por la Independencia de la Nueva España. La luz más brillante de la Guerra por la Independencia de nuestro País, se apagó, pero su ejemplo y entrega a la causa libertaria, siguió fructificando, hasta lograr su objetivo.
Comparto su última carta, dirigida a su hijo, Juan Nepomuceno Almonte.
Tepecuacuilco, noviembre 13 de 1815.
Mí querido hijo Juan:
Tal vez en los momentos que ésta escribo, muy distante estarás de mi muerte próxima. El día 5 de este mes de los muertos he sido tomado prisionero por los gachupines y marcho para ser juzgado por el caribe de Calleja.
Morir es nada cuando por la patria se muere, y yo he cumplido, como debo con mi conciencia y como americano. Dios salve a mi patria, cuya esperanza va conmigo a la tumba.
Sálvate tú y espero serás de los que contribuyan con los que quedan aún a terminar la obra que el inmortal Hidalgo comenzó. No me resta otra cosa que encargarte que no olvides que soy sacrificado por tan santa causa y que vengarás a los muertos.
El mismo Carrasco te entregará, pues así me lo ofrece, lo que contiene el pequeño inventario, encargándote entregues la navaja y le des un abrazo a mi buen amigo don Rafael Valdovinos.
Tú recibe mi bendición y perdona la infamia de Carrasco.
Tú Padre, José María Morelos.
Te encargo que la Virgen del Rosario la devuelvas a la Parroquia de Carácuaro, cuya imagen ha sido mi compañera. A Dios.
Ésta misiva constata el gran amor de Morelos, por su Patria, su nobleza y valentía y que ha sabiendas cuál sería su destino final, nunca dudó que nuestra Nación, lograría su independencia. Morelos, un héroe de carne y hueso, fue, es, y será, siempre, un ejemplo a seguir, a nivel universal.
«Denme dos Morelos y conquistaré el mundo», Napoleón Bonaparte.